Retrato de Carlos V - Portrait of Charles V – Barend van Orley

Museo nacional de Bellas Artes de Budapest
1519
71,5 x 51,5 cm. Óleo sobre lienzo

Barend van Orley

Pieza de extraordinario interés histórico y documental. El futuro emperador aparece en busto, ante un pretil en el que descansa su mano izquierda, vistiendo un manto con vueltas de piel sobre el que se despliega el Toisón de Oro. Su rostro, todavía barbilampiño, ha sido representado casi de perfil, posición que acusa rasgos característicos como la prominente nariz, el labio inferior Habsburgo y el afilado mentón. Se cubre con un sombrero de ala ancha que lleva prendidos un broche y botones ornados con la letra C. Van Orley ha logrado plasmar en este sencillo retrato la personalidad de un joven modelo que estaba llamado a regir los destinos de Europa durante las cuatro décadas siguientes, tras haber sido elegido emperador romano-germánico en 1519. El cuadro debe ser anterior a dicha fecha, puesto que el artista no volvería a encontrar a Carlos V después de la partida de éste a España, en 1517, para hacerse cargo del reino que heredó a la muerte de su abuelo materno, Fernando el Católico. Cabe pensar, en suma, que el retrato fue ejecutado cuando Carlos V contaba tan sólo dieciséis años de edad.