Trafico de visitas

martes, 10 de enero de 2012

La Grande Jatte - Georges Seurat

La Grande Jatte - Georges Seurat - Art Institute de Chicago. El paisaje y las figuras fueron construidos con la técnica, característica de su autor, de la aplicación del color en estado puro y por medio de toques independientes que crean una trama destinada a fundirse en la retina del espectador si el cuadro se observa a la distancia adecuada. Seurat conocía a fondo la teoría óptica y se dejaba guiar como pintor por un espíritu científico. De ahí que la composición y las formas hayan sido tratadas con extraordinario rigor, como si su ejecución estuviese sometida a las normas inamovibles de una experiencia de física desarrollada en un laboratorio. A pesar de tal circunstancia, el conjunto produce una primera impresión satisfactoria de vibración lumínica, gracias al sutil juego de fluctuación de colores en la retícula de puntos que forma la superficie pictórica. En esta atmosfera tornasolada hallan su lugar varias parejas de paseantes, hombres y mujeres aislados, un músico aficionado que se ejercita en el arte de tocar la trompa, una mujer que pesca con caña, niños que juegan o se pasean con su institutriz… En la plateada superficie del agua, las embarcaciones de vela, de remo o a motor componen un mosaico de reflejos.
Art Institute de Chicago
1884
207,6 x 308 cm. Óleo sobre lienzo

El paisaje y las figuras fueron construidos con la técnica, característica de su autor, de la aplicación del color en estado puro y por medio de toques independientes que crean una trama destinada a fundirse en la retina del espectador si el cuadro se observa a la distancia adecuada. Seurat conocía a fondo la teoría óptica y se dejaba guiar como pintor por un espíritu científico. De ahí que la composición y las formas hayan sido tratadas con extraordinario rigor, como si su ejecución estuviese sometida a las normas inamovibles de una experiencia de física desarrollada en un laboratorio. A pesar de tal circunstancia, el conjunto produce una primera impresión satisfactoria de vibración lumínica, gracias al sutil juego de fluctuación de colores en la retícula de puntos que forma la superficie pictórica. En esta atmosfera tornasolada hallan su lugar varias parejas de paseantes, hombres y mujeres aislados, un músico aficionado que se ejercita en el arte de tocar la trompa, una mujer que pesca con caña, niños que juegan o se pasean con su institutriz… En la plateada superficie del agua, las embarcaciones de vela, de remo o a motor componen un mosaico de reflejos.


Obras de:
Georges Seurat
Baño en Asniéres El circoLa Grande Jatte


No hay comentarios :

Publicar un comentario

Comenta por favor, me interesa tu opinión

Posts Populares

Comentarios